Mejorar la percepción sobre las carreras de ciencias y tecnología; incentivar vocaciones; renovar la cultura del esfuerzo frente a mensajes de la sociedad que calan en sentido contrario e informar sobre la realidad de un mercado laboral en constante transformación.

Solo así, las personas en edad de tomar una decisión sobre sus estudios universitarios podrán elegir la más acertada. Es el enfoque coincidente de Iddtek, Sener, Aleovitro y Biofungitek las cuatro empresas que han participado en las jornadas formativas del programa Ezagutu Aukeratzeko de Gaztedi impartido por la Mancomunidad de servicios del Txorierri y subvencionado por la Diputación Foral de Bizkaia el pasado mes de enero en Politeknika Txorierri.

La iniciativa formativa, que suma ya más de diez ediciones, ha cumplido un año más con su misión de reunir en un mismo espacio a profesionales y empresas con una clara orientación hacia las formaciones STEM (ciencias, tecnologías, ingeniería y matemáticas).

Formación técnica para la juventud

Las personas destinatarias de las mesas sectoriales es el alumnado de primero de bachiller. La selección no está hecha al azar, pues es en esta etapa de su vida cuando las personas jóvenes deben decidir qué camino tomar sobre su futuro.

Fieles al compromiso con la juventud, y desde la perspectiva de quince años en el mundo de la ingeniería, en su intervención Iddtek incidió en la importancia de la actitud a la hora de trabajar: “En Iddtek, el 15% es conocimiento y formación, el 35% habilidad y experiencia, y el 50% actitud”.

Conscientes de que la evolución de la sociedad no discurre en paralelo a los avances tecnológicos, Iddtek adapta su formación a las cambiantes necesidades; promocionar la inserción laboral juvenil es el objetivo que persigue y lo logra gracias a actividades como Ezagutu Aukeratzeko.

El enfoque de la empresa de ingeniería Sener, representada por Oiane Niebla es el de “fomentar el conocimiento de los estudios tecnológicos” porque al contrario de lo que se pueda pensar “faltan vocaciones”. Algo que le parece extraño porque la juventud está rodeada de tecnología.

Reconocimiento a la iniciativa de Ezagutu Aukeratzeko

Sin embargo, Niebla echa en falta la curiosidad aparejada a este tipo de estudios. Por ello, aplauden iniciativas como la del programa Ezagutu Aukeratzeko de Gaztedi consistentes en dar a conocer carreras científicas y tecnológicas.

En su intervención, Sener, una empresa de ingeniería multidisciplinar, mostró proyectos con ejemplos prácticos de todos los pasos que se dan en una obra como la del túnel que irá por debajo de la ría de Bilbao o el funcionamiento de un robot.

Sener está acostumbrada a este tipo de actividades, ya que entre otras, organiza ‘Un reto por la ciencia’ con la que “fomentamos las vocaciones científico-tecnológicas”, subrayan desde la ingeniería.

En este proyecto, “acercamos el mundo de la ingeniería y la tecnología a los jóvenes y adolescentes en sus centros escolares. A través de la presentación de diferentes retos a los que los profesionales de SENER se enfrentan diariamente, mostramos cómo la ingeniería, la ciencia y la tecnología pueden mejorar la vida de las personas”, cuenta Niebla.

Gracias a ‘Un reto por la ciencia’, más de ochocientas personas jóvenes han conocido de cerca el mundo de la ingeniería y cuál puede ser su trabajo el día de mañana si deciden estudiar una carrera técnica.

Freno a la incertidumbre laboral

Y es que para contrarrestar la incertidumbre reinante en la sociedad actual que se acentúa en el período de la adolescencia, son necesarias actividades como las del programa Ezagutu Aukeratzeko, ya que como su propio nombre indica, están organizadas para elegir con conocimiento de causa. Y así lo ve otro de los participantes, Antonio Laso, de la firma AleoVitro, que califica estas reuniones como muy positivas y necesarias.

Este investigador comparte con el resto de participantes en los encuentros formativos de Gaztedi la falta de vocaciones a causa del mensaje que de manera sistemática reciben las personas jóvenes por parte de la sociedad actual de quitar valor a la cultura del esfuerzo.

Algo contrario a la trayectoria de los CEOs de Aleo Vitro, el propio Antonio Laso y Eneko Ochoa, cuyos caminos se cruzaron en la incubadora de empresas del Parque Tecnológico de Zamudio.

Desde ahí, han andado un largo camino plagado de esfuerzo y sorteado muchas ‘piedras’ que no les impidieron cursar un postdoctorado en Japón con una beca, en el caso de Laso, y un ciclo formativo en botánica y la Licenciatura en Biología en el caso de Ochoa.

La empresa que fundaron en 2014, Aleo Vitro, lleva años trabajando en líneas de investigación con aplicaciones en la farmacología, como son la propagación in vitro de plantas o análisis químicos y acaba de recibir la autorización para investigar nuevos usos farmacológicos del cannabis.

Cometido: acercar las carreras tecnológicas

Ayudar a procesar mejor la información sobre las carreras tecnológicas es el cometido, conseguido, de la empresa Biofungitek a través de su representante Igor Setién en las mesas sectoriales de Gaztedi.

Biofungitek es una de las pocas empresas que busca soluciones biotecnológicas en Euskadi. De base tecnológica, Biofungitek investiga y desarrolla fungicidas y formulaciones nutricionales eficaces para el tratamiento sostenible de cultivos.

Y recientemente se ha proclamado ganador de la categoría Medioambiente (Corporativo) en la ceremonia de clausura y gala de la Cumbre Mundial de la Red Tecnológica en la noche del 15 de noviembre, celebrada en el Edificio Time & Life en la ciudad de Nueva York.

Objetivo cumplido: conocer para elegir

El resultado de las mesas sectoriales ha sido dar a conocer a las personas jóvenes ávidas de nuevas experiencias, la trayectoria profesional de personas que hoy por hoy se han ganado un buen posicionamiento dentro del tejido empresarial de Txorierri.

Quién sabe, quizá en unos años, alguna o algún joven participante en este programa ocupe también un lugar destacado y pueda transmitir de primera mano su trayectoria y sus logros.